“Cuando la lluvia le gana al fútbol”

Y sí… la pelota no se mancha, pero se moja. Y cuando se moja tanto, mejor guardarla

18 de abril 2025 | 23:45 

Cabletuc.npsagencia | Editorial | En San Miguel de Tucumán, el fútbol se quedó en pausa. La tormenta, anunciada desde temprano, cayó con toda su furia justo una hora antes del arranque. El José Fierro, lejos de parecer un estadio, era más bien una cancha anegada, pelota que no corría, charcos en las áreas… imposible jugar.

Darío Herrera, árbitro del partido entre Atlético Tucumán e Independiente, no dudó: caminó el campo con los capitanes, lo vio claro y decidió suspender. Una decisión difícil, pero necesaria. “La prioridad es la seguridad de los protagonistas”, dijo. Y no se equivocó.

Ni los jugadores ni los dirigentes pusieron peros. Mateo Coronel lo dijo sin vueltas: “Queríamos jugar, pero era peligroso”. Desde el lado del Rojo, Néstor Grindetti también apoyó: “La raya del arco estaba tapada por agua, no se podía jugar así”. Sentido común, que no siempre abunda, esta vez fue el que metió el gol.

Pero la suspensión no vino sola. El calendario está más apretado que vestuario visitante. Atlético tiene partidos claves, Independiente viaja por Copa… y ahora hay que buscarle una fecha a este encuentro. El miércoles 30 suena como la más viable, pero la confirmación oficial todavía no llegó.

Mientras tanto, la gente –esa que se mojó, que esperó, que hizo el aguante bajo la tormenta– se fue con bronca, con frustración, y con un dejo de resignación. Porque el fútbol, a veces, también pierde con el clima.

Y sí… la pelota no se mancha, pero se moja. Y cuando se moja tanto, mejor guardarla. Porque hay días en que el fútbol tiene que esperar. Y esta noche, en Tucumán, fue uno de esos días.